¿Qué hacer para ahorrar en tiempos de combustible tan caros?
Como se pronosticaba desde hace al menos tres meses, el aumento del valor del diésel alcanzó a los tractores que mueven la agricultura argentina al punto de delimitar el uso diario por equipos.
La situación de casi escasez de insumos para los productores de las zonas rurales, provocada por la Guerra de Ucrania, ya está dando vueltas por la zona urbana, para provocar situaciones polémicas en estos tiempos difíciles.
Algunos días, cuando se anticipan nuevos ajustes anunciados, los conductores hacen cola en las gasolineras para ‘aprovechar el precio’, como dicen. En otros, la demanda es baja debido al costo adicional impuesto a las familias.
Es precisamente este último punto el que abordaremos en este texto: qué puedes hacer para al menos intentar ahorrar dinero en estos días de combustible tan caro. Echa un vistazo a algunas alternativas a continuación.
1 – PASEO SOLIDARIO
Dejar el coche en el garaje no es una solución tan sencilla para muchas familias que dependen del uso diario para compromisos rutinarios: llevar a los niños a la escuela, ir y volver del trabajo y otras necesidades.
Con la gasolina tan cara, el truco está en improvisar para ir y venir. Los condominios residenciales han organizado y alentado a sus residentes a compartir el espacio disponible en sus autos con sus propios vecinos.
La iniciativa suele funcionar bien en el sistema de relevos: cada día de la semana alguien o un grupo saca autos a la calle con recorridos que atienden necesidades comunes (escuela, trabajo, supermercado). todos ganan
2 – EXTERNALIZACIÓN
Si no tienes la misma disponibilidad que vecinos, amigos o familiares para compartir el uso del coche, puede que tengas que recurrir a la contratación de un tercero para moverte por tu ciudad.
En este punto te estarás preguntando: “si es para pagar el bus, el taxi o alguna app, prefiero ponerle gasolina al auto y salir”. Es necesario, sin embargo, considerar dos puntos.
El primero es el hecho de que usted tiene un coche. Si no, eso es lo que te queda por hacer, considerando la necesidad de un transporte. Si es así, considera que el uso del coche no se limita al combustible, sino al desgaste natural de neumáticos, motos, caja de cambios, etc…
3 – TRANSPORTE PÚBLICO
Otra pregunta que puede estar dando vueltas: “¿Por qué no usamos el transporte público como primera alternativa para poner nuestro carro a gastar la carísima gasolina de cada día?”.
Por dos razones. La primera es que quienes tienen coche muchas veces prefieren dejarlo en la calle antes que enfrentarse a autobuses, trenes y cualquier otro vehículo abarrotado, más ahora en tiempos de pandemia (sí, el virus sigue circulando).
La segunda tiene que ver con un comportamiento que ha sido replicado principalmente por las nuevas generaciones -o por quienes se han sumado a las nuevas relaciones con la movilidad urbana- y simplemente prefieren no tener coche en el garaje.
4 – IR A PIE O EN BICICLETA
Antes de que nos maldigan, acepta nuestra justificación. Obviamente, le sugerimos que elija caminar en situaciones en las que pueda llegar fácilmente a su destino, por ejemplo, al trabajo.
Aun así, créeme: ya hay mucha gente que cambia los zapatos por zapatillas y se enfrenta a medias y largas distancias sobre el pedal para cumplir con su agenda diaria. Echa un vistazo a las calles de tu ciudad.
Además de ser una alternativa barata -prácticamente gratuita- a la movilidad, también contribuyes a tu salud mediante la práctica de hábitos saludables. Ante la duda y en tu posibilidad, haz una prueba de fin de semana.
Quién sabe, el dinero que está ahorrando para llenar el tanque de gasolina de su automóvil pronto puede tener un destino diferente, en dos ruedas o en un nuevo par de zapatos adecuados para una caminata placentera.